La importancia de la figura del dermatólogo crece a pasos agigantados en nuestras vidas. Según los datos proporcionados por Chanel, el 42 por ciento de las mujeres norteamericanas tiene su propio dermatólogo de cabecera, frente al 20 por ciento de las europeas o el 26 por ciento de latinoamericanas. Cifras en aumento, pero bastante bajas si comparamos con las asiáticas, que suman el 75 por ciento. Como afirma el doctor Julián Sánchez Conejo-Mir, "cuantas más capas epidérmicas retire el dermatólogo, más agresivo será el proceso y más lenta la recuperación de la piel".
De ahí aparece el soft peeling, dermoabrasiones superficiales más frecuentes que no interrumpen el ritmo de vida en lugar de una dermoabrasión profunda que obliga al paciente a reposar en casa varias semanas. El mundo de la cosmética ha buscado entonces fórmulas suaves a base de combinaciones de ácidos o microcristales de óxido de aluminio que pulen la piel para devolverle el brillo, luminosidad, eliminar manchas o arrugas. Este tipo de cosmética, que lleva unos 5 años en el mercado, no suple las visitas al dermatólogo; son simplemente un complemento. "Los peelings superficiales van mucho más allá de mejorar el aspecto estético de la piel. Antes pensabamos que sólo los peelings medios eran capaces de inducir la formación de colágeno y fibras elásticas, pero estamos viendo que las dermoabrasiones suaves y más frecuentes pueden lograr los mismos resultados. Y desde el punto de vista de la salud, estas técnicas pueden prevenir tumores cutáneos y constituyen un excelente método de profilaxis en algunas patologías cutáneas", añade el doctor.
La línea Resurface Peel de Lancôme se compone de cuatro productos para conseguir una nueva piel. El proceso comienza con la toallita de Loción preparadora astrigente, y continua con una dosis de Crema peeling. Esta es mejor aplicarla con un pincel (como cualquier otra crema hidrantante) ya que de esta forma aplicamos mejor el producto y sin derrocharlo. Seguidamente, y tras unos 5 minutos que lo dejemos actuar, secamos el rostro con las toallitas neutralizantes, que devuelven a la piel su PH natural, y por último, con la Crema Post-peeling reconfortante calmamos la piel y prevenimos posibles irritaciones.
Si prefieres probar con un producto más económico, L' Oreal Paris propone un kit de micro-dermoabrasión que se realiza en dos etapas de dos minutos, dos veces a la semana. Primero se extiende el exfoliante Refinador sobre la piel limpia y se trabaja el producto con las manos evitando el contorno de ojos y labios durante un minuto. Después de aclarar la cara con agua tibia hasta eliminar la exfoliante por completo, se reparte por todo el rostro el Tratamiento Hidratante Optimizante para proteger la piel (por unos 18 euros).
Fuente: Vogue España
Fotos: Vogue Paris/ lancome/ google
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